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SANTO DOMINGO. –Una multitud de más de catorce mil personas presenciaron como el zurdo estadounidense Kenneth MacKenzie y el novato dominicano Ceferino Foy dominaron, de las Estrellas, dominicano al Escogido en el Juego Inaugural del Estadio de San Pedro de Macorís.
Las Estrellas Orientales se impusieron a los campeones del Escogido 4-2 en el torneo nombrado como “Era de Trujillo”, en donde el presidente Héctor Trujillo realizo el lanzamiento simbólico de la primera bola.
Las páginas deportivas del periódico El Caribe destacaban el grandioso auge de los deportes en el país bajo la rectoría del dictador Trujillo para el primer juego del Estadio de las Estrellas Orientales el viernes 24 de octubre de 1958.
Los estadios de Santo Domingo, Santiago y San Pedro de Macorís, fueron levantados durante la Era de Trujillo, todos diseñados y construidos por el arquitecto e ingeniero Bienvenido Martínez Brea (Bebecito), con capacidad para 5,350 fanáticos.
Fue inaugurado con el nombre de Estadio Oriental, luego en 1963 el Congreso de la República Dominicana aprobó que llevara su nombre en honor de Tetelo Vargas.
El estadio tiene capacidad para 8000 personas,5 siendo el más pequeño de la Liga local.
Las dimensiones de la casa de los “bigleaguers dominicanos” mide 335 pies (102 metros) en el izquierdo y por el derecho, 365 pies (111 metros) en el izquierdo-central y derecho-central y 385 pies (117 metros) en el centro.
El canadiense MacKenzie MacKenzie, quien había jugado con la Triple A de los Bravos de Milwaukee en el verano, trabajó con sus curvas pronunciadas que partieron el home a la altura de las rodillas.
Con sus bolas rápidas y slider, fue parte de su repertorio para neutralizar con efectividad inesperada durante seis entradas, el poder ofensivo de los Leones impresionado grandemente al entusiasta público de San Pedro de Macorís, que veía por primera vez, beisbol bajo luces.
“Es un gran equipo ese “manifestó el zurdo MacKenzie refiriéndose al Escogido en entrevista con el periódico El Caribe. “Todos son bateadores de cuidado” agregó.
Expresó que tenías informes del buen beisbol que se juega en Dominicana, pero que no esperaba que un solo equipo tuviera en tan buenos jugadores en su alineación.
Los Leones tenían en juego a Willy McCovey, Felipe Alou, Manuel Mota, Ozzie Virgil y Juan Marichal, que venían de ganar el campeonato en los últimos tres inviernos.
En el torneo 1958-59, Felipe, registró lo que muchos consideran como la mejor actuación ofensiva que jamás un jugador haya tenido en el béisbol dominicano en una temporada.
Los registros de Alou: Felipe, bateó para promedio de .351, 61 hits en 170 turnos, 17 dobles, 5 triples y 7 cuadrangulares, empujó 43 carreras, anotó 45 y se robó 14 bases.
Líder de los departamentos de bateo, anotadas, empujadas, hits, dobles, bases robadas y fue co-líder en triples. Su nombre figuró en primer lugar en 7 encasillados, algo nunca visto en los anales de nuestra pelota profesional.