San Pedro de Macorís. Junior Lake es un soldado de muchas batallas en la guerra que por la supremacía se libra año por año, entre los seis equipos de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana.
El jardinero de las Estrellas conoce como pocos del sacrificio que conduce al éxito en la difícil empresa. Quizás por eso, ha levantado su voz, y ha lanzado la que pudiera ser vista como una advertencia de guerra.
“Tenemos que seguir jugando duro. Tres victorias no clasifican a nadie”, ha dicho Lake, después de ver a las Estrellas, situarse en el primer lugar del Round Robin o Serie Semifinal del actual torneo.
“Hay que seguir jugando el béisbol como lo hemos venido haciendo en estos días”, agregó el capitán del equipo que tiene por sede San Pedro de Macorís, el último en lograr su pase al Round Robin, la parte del torneo para la cual clasifican 4 equipos, en busca de dos de ellos avanzar a la Serie Final, en una contienda que tiene programada 18 juegos para cada club.
Las Estrellas (3-1) han ganado sus últimos tres juegos (uno a las águilas Cibaeñas y dos a los Gigantes del Cibao), después de haber perdido su primer juego del también llamado Todos Contra Todos (frente a los Tigres del Licey).
Así, la tropa verde llegó a la brecha de las festividades por Navidad (23, 24, 25, y 26 de diciembre) con ventaja de un juego sobre Licey (2-2) y Águilas (2-2), y de dos juegos sobre los Gigantes (1-3).
Lake, un integrante de equipos campeones en años sucesivos entre 2018 y 2020 (Águilas, Estrellas y Toros), no había actuado en la refriegas beisbolera de esta segunda etapa del campeonato, hasta el más reciente partido, el cual resultó en una victoria 4-2 sobre los Gigantes, en la última jornada previo al “alto al fuego”, por la Navidad.
El talentoso jardinero, bateó de 3-1, anotó una carrera, y con su velocidad fue un factor para el triunfo al robarse una base, provocar un tiro malo a segunda base por un lanzador que intentó sorprenderlo allí y su imparable movió a un corredor a la tercera base, desde donde anotó en carrera.
“Sólo tengo control sobre salir a jugar duro, montar un buen espectáculo, cuando me pongan a jugar”, señaló Lake, quien por primera vez en su carrera, desde que se convirtió en jugador regular, se ha visto en la situación de ver la mayoría, hasta ahora, de los juegos de un Round Robin, desde la banca.
Y eso, después de la peor actuación (.164-1-2) en una Serie Regular, en su carrera de 14 temporadas en la Liga Dominicana, la cual comenzó a los 19 años de edad (2009-2010) y en la cual se estableció como uno de los mejores peloteros de la justa a los 22 años (2012-2013).
“Debo estar listo para hacer mi trabajo cuando me lo pidan”, sostuvo Lake, quien han visto jugar al joven “bigleguer” Oscar González en su puesto regular de jardinero izaierdo, entre un trío de jardineros que han completado otros dos jugadores que actuaron este año en las Grandes Ligas: Cristian Pache (en el jardín central) y el importado venezolano Edward Olivares (en el jardín derecho).
Equipo cambiado
“Nuestro equipo ha cambiado con la entrada a juego de Robinson Canó (DH), y la selección en el draft de reingreso de Jeimer Candelario (3B) y Danny Santana (2B”, ha dicho el mánager de las Estrellas, Fernando Tatis.
“Con esos hombres ha mejorado nuestra ofensiva. También ha mejorado en su bateo un hombre como Lewin Díaz (1B)”, ha señalado Tatis.
“Tenemos más gente capaz de producir y todos tendrán la oportunidad de hacerlo. Ese es mi trabajo como mánager. Mantenerlos a todos contentos y produciendo”, explicó Tatis sobre el manejo de sus hombres, en la difícil batalla que siempre representa el Round Robin, una para la cual Lake ha sido reclutado por otras escuadras (Águilas, Toros), después de la eliminación de las Estrellas; habiendo ganado la guerra cada una de esas veces.
Ahora, el capitán de las Estrellas está en su propia tropa, a la que ya ha lanzado su advertencia: “tres victorias no clasifican a nadie”, para la Final.