Your browser doesn’t support HTML5 audio
El ex receptor Carlos Paulino ha iniciado una nueva etapa en su vida profesional, ahora desde el rol de dirigente y formador.
Actualmente funge como mánager de los Atléticos de Puerto Plata, además de ser coach de receptores de las Estrellas Orientales en Lidom y coach de los Conspiradores de Querétaro en la Liga Mexicana, bajo la dirección de José Offerman.
Paulino, de 35 años, nacido en Puerto Plata, dejó una huella importante en el béisbol dominicano. En la LIDOM disputó 400 partidos, acumulando 1,112 turnos al bate, 251 imparables, 34 dobles y 20 cuadrangulares, con un promedio de .226.
Su defensa fue uno de sus sellos distintivos, lo que le permitió conquistar tres Guantes de Oro durante su trayectoria.
Gran parte de su legado en la pelota invernal está ligado a los Gigantes del Cibao, equipo con el que jugó durante 14 campañas y al que agradece profundamente.
“Lo que fui en la liga de invierno se lo debo a los Gigantes del Cibao, a la familia Rizek que me dio el apoyo y confió en mí, venía de la nada de no tener número y ponerme como regular”, expresó el ex receptor.
En su paso por los Estados Unidos, Paulino jugó en Ligas Menores con varias organizaciones. Entre 2008 y 2010 perteneció a los Marlins de Miami; en 2011 firmó con los Piratas de Pittsburgh, donde se mantuvo hasta 2014.
⚾️🔥 Tremendo encuentro previo al partido entre Atléticos de Puerto Plata y Reales de Santiago.
Presentes en el estadio: Diógenes Almengo, Henry Urrutia y Carlos Paulino 👏⚾La pelota une a grandes figuras en Puerto Plata. 🌊💙#Beisbol #PuertoPlata #LigaDeVerano pic.twitter.com/k0GSXUxjRR
— franklyn Martinez Cabrera (@franklynneftali) September 5, 2025
Posteriormente vistió el uniforme de los Mellizos de Minnesota en 2015 y 2016, regresó a los Marlins en 2017 y ese mismo año volvió a los Mellizos. En 2018 se convirtió en agente libre.
Paulino valora de manera especial los campeonatos conquistados con los Gigantes, que marcaron momentos inolvidables en su carrera.
“Los dos campeonatos del equipo son de las cosas que no se olvidan, más que satisfecho de estar en esos lineups”, recordó al ser entrevistado por Luis Tomas Rae para Grandes en los Deportes.
No obstante, también vivió momentos difíciles, como cuando tuvo que salir de los Gigantes. “Fue una decisión bastante dolorosa, quería retirarme con ellos, pero como es un negocio terminé jugando para las Águilas”, confesó.
Su etapa con las Águilas Cibaeñas también le dejó gratos recuerdos. “Fue una experiencia bonita jugar para las Águilas, cuando juegas para un equipo de esa categoría, cuando uno se pone ese uniforme adquiere el compromiso”, afirmó.
Ahora, desde los banquillos, Paulino busca transmitir todo lo aprendido en más de una década como jugador profesional.
Su carrera, marcada por la defensa sólida, el esfuerzo y la gratitud hacia quienes confiaron en él, continúa escribiéndose en un nuevo capítulo, esta vez como líder y formador de la próxima generación de peloteros.

