Your browser doesn’t support HTML5 audio
Los fanáticos fueron testigos de la majestuosa apertura del iluminado estadio Leonidas Radhamés, nombre con que fue originalmente bautizado el parque, construido por el Estado Dominicano a un costo de un millón 500 mil pesos, bajo la dirección del ingeniero Bienvenido Martínez Brea, por iniciativa de un grupo de directivos aguiluchos encabezados por Reynaldo “Papi” Bisonó.
A la inauguración asistió el dictador Rafael Trujillo, acompañado de Joaquín Balaguer, mientras que su hijo menor, Radhamés Trujillo, fue quien encendió las luces del primer partido nocturno fuera del Estadio Trujillo de la capital.
El estadio fue levantado en los terrenos donde antes funcionó el Hipódromo La Herradura, inaugurado en 1917 en terrenos de Eliseo Espaillat, en la barriada de Baracoa. Posteriormente, en 1945, se edificó un segundo hipódromo que también acogió partidos de béisbol y fue remodelado en 1956, antes de dar paso al actual estadio.
La ceremonia incluyó la bendición del inmueble por Monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito, arzobispo de Santiago, y el discurso oficial a cargo de Víctor Garrido Puello, entonces secretario de Educación y Bellas Artes.
Según reseña del periódico La Nación del 26 de octubre de 1958, los batazos de Dick Stuart fueron profetizados por el propio jugador en el Hotel Matum, donde se hospedaba antes del encuentro.
Las Águilas obtuvieron la victoria en el Día Inaugural del Estadio Cibao al vencer 7-4 a los Tigres del Licey, ante una multitud de 15,000 fanáticos, el sábado 25 de octubre de 1958. De esa forma, el “nido aguilucho” cumple hoy 66 años desde aquel histórico primer juego.
Stuart conectó dos cuadrangulares en sus primeros turnos: uno monumental por el jardín central y otro por el izquierdo.
Forrest Smith agregó otro jonrón con dos a bordo para sellar la victoria de las Águilas.
El Estadio Cibao ha sido escenario de múltiples momentos históricos, incluyendo la Serie del Caribe de 1976 (compartida con el Estadio Quisqueya) y la Serie del Caribe de 2008, celebrada íntegramente en Santiago.
Durante el verano de 2004, el parque fue sometido a una remodelación total, con una inversión superior a RD$2 millones, que incluyó mejoras en el terreno de juego y la instalación de una moderna pizarra electrónica.
